Los quesos, tradición y calidad 2: Quesos del sur de España y de las Islas.
En Castilla y León y Castilla-La Mancha es la oveja churra y castellana la que domina la meseta. En Castilla y León los quesos son mantecosos y nos enamoran los Quesos Zamoranos con D.O.P y los castellanos, más compactos, de pasta dura y grasos. Los manchegos, los de Castilla-La Mancha, famosos en casi todo el mundo, son quesos semicurados o curados de oveja de la raza manchega. En Extremadura sus quesos están elaborados con leche de oveja merina y cabra retinta o verata. El más famoso y conocido es la Torta del Casar, un queso fundente, de olor intenso y sabor maravilloso junto al Queso de La Serena, elaborado con leche de oveja merina y el Queso Ibores, con leche cruda de cabra serrana, verata y retinta.
Los quesos Cádiz, Grazalema y Aracena son nuestros quesos andaluces, elaborados con leche de cabra o de oveja. En Murcia se elaboran con leche de cabra murciana. Son quesos frescos y curados con dos denominaciones de origen: Queso de Murcia y Queso de Murcia al Vino.
En Canarias, los quesos han jugado y juegan un papel fundamental en la tradición gastronómica de las islas. Cuenta con razas autóctonas, sobre todo de ganado caprino, que aportan una extraordinaria calidad a su leche dando lugar a los Quesos Majoreros de la isla de Fuerteventura, el palmero o el gomero. Sin olvidar el Queso Flor de Guía, elaborado con leche de oveja canaria. En las Islas Baleares es conocido el queso Mahón-Menorca, también con denominación de origen, elaborado con leche de vaca.
En España hay muchísimos quesos que no forman parte ni tienen un sello de calidad que lo represente pero que ofrecen y tienen una calidad extraordinaria. Más de uno de nosotros los conocemos y nos acordamos de alguno por el sabor que nos dejó. Sin duda alguna, como dijo Marta Fernández de la Quesería asturiana Ca Sanchu, “cada queso habla de su tierra y de su identidad”. Y así es.