¿Por qué decimos que el Aceite de oliva es la piedra angular de la dieta Mediterránea?

Debemos insistir en la importancia real de su uso en la alimentación diaria, dar a conocer sus propiedades y nosotros los especialistas en la materia debemos estar comprometidos en la difusión de su enorme cantidad de beneficios.

Nuestro maravilloso aceite de oliva representa el elemento distintivo de la denominada “dieta mediterránea”, siendo el principal componente graso de la dieta. Esta forma de alimentación típica de los países ribereños del mar mediterráneo desde hace muchos siglos, se ha convertido por derecho propio en una de las mejores formas de nutrición a nivel mundial que se completa con el consumo de verduras frescas y frutas, legumbres, pan, pescado, moderado consumo de carnes blancas y bajo de carnes rojas, con una moderada cantidad de vino. Muchos estudios indican que el aceite de oliva es efectivo en la prevención y reducción de hipercolesterolemia, aterosclerosis, hipertensión, enfermedades cardiovasculares, oxidación y estrés oxidativo, obesidad, diabetes tipo 2, procesos inflamatorios y cáncer.

¿Qué enfermedades previene el consumo de aceite de oliva?

Uno de los más brillantes aportes de la ciencia española ha sido la presentación del estudio PREDIMED, prevención con dieta mediterránea, donde de una manera clara y concisa se demuestra como con el consumo diario de este oro verde nuestras arterias están más protegidas, nuestro aparato cardiovascular también y la posibilidad de desarrollar patologías como la diabetes, la demencia o el cáncer disminuyen de forma notable.

En trabajos que hemos tenido el honor de dirigir, también se ha podido ver los efectos anti envejecimiento, mejoría en la actividad física, pérdida de peso, mejor desarrollo en los niños y adolescentes, etc.

Así incluso ya en los Estados Unidos desde noviembre de 2004, la Administración de Fármacos y Alimentos (FDA) de los Estados Unidos, reconoció los efectos beneficiosos del aceite de oliva sobre los factores de riesgo cardiovascular y recomendó el consumo de dos cucharadas de aceite de oliva (23 g) diariamente.

¿Qué diferencia al aceite de oliva de otros aceites?

El aceite de oliva se diferencia de otros aceites vegetales en dos características esenciales que lo hacen también más apreciado, procede de un fruto y es comestible (no necesita ser refinado) en el momento de la producción cuando la materia prima es de buena calidad; de esta manera la denominación de aceites de oliva virgen se reserva a los aceites obtenidos a partir del fruto del olivo únicamente por procedimientos físicos, en condiciones, sobre todo térmicas, que no ocasionen la alteración del aceite y que no hayan sufrido tratamiento alguno distinto del lavado, la decantación, el centrifugado y la filtración, con exclusión de los aceites obtenidos mediante disolventes o por procedimiento de reesterificación y de cualquier mezcla con aceites de otra naturaleza.

El valor biológico y terapéutico del aceite de oliva está directamente relacionado con su composición química. La cualidad más importante es que conserva inalterables todos los componentes y propiedades de las aceitunas como auténtico zumo del fruto del olivo, destacando su valor nutritivo y su alto poder vitamínico.

Además, contienen gran cantidad de polifenoles, responsables no solo del sabor amargo característico, sino que además tiene un gran efecto antiinflamatorio y anti oxidativo que previene un sinfín de patologías. La mayor recomendación nuestra es para el aceite de oliva virgen extra.

Dr. Rafael Gómez y Blasco.

Medico Endocrinólogo

Miembro de SEEDO, FECCOM, ASMEHC, FLASO…